São Paulo compartirá en la Bienal su experiencia urbana rica en contrastes y aprendizajes

São Paulo llegará a la décima Bienal Internacional de Arquitectura de Santa Cruz (BASC) con una mirada profunda a su arquitectura y a las lecciones de una metrópoli en constante transformación. Como ciudad invitada a la muestra, su presencia estará marcada por una propuesta curatorial que busca explicar cómo una urbe que comenzó como un pequeño asentamiento colonial se convirtió, en menos de un siglo, en la mayor metrópoli del hemisferio sur.

El curador responsable de la exposición será Ivo Giroto, profesor del Departamento de Historia de la Arquitectura y Estética del Diseño en la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad de São Paulo (FAU-USP). En la actualidad, el profesional investiga temas relacionados con la cultura urbana y la arquitectura moderna y contemporánea en Brasil y Latinoamérica, con énfasis en la producción de infraestructuras culturales.

Giroto adelantó que la muestra “São Paulo – Ciudad Invitada” combinará historia, arquitectura y reflexión urbana para mostrar los desafíos y las soluciones que definieron a la capital paulista. La exhibición incluirá una selección de obras emblemáticas de la arquitectura moderna paulista del siglo XX, entre ellas edificios brutalistas y proyectos verticales que surgieron como respuesta al acelerado proceso de densificación urbana. “Las maquetas de estas construcciones permitirán al público comprender cómo São Paulo respondió, desde el diseño y la ingeniería, al crecimiento poblacional y a las exigencias de una ciudad en expansión permanente”, indicó.

La exposición destacará experiencias exitosas, como la consolidación de la red de metro y la implementación de estaciones de transporte masivo, sistemas que no sólo mejoraron la movilidad interna en la urbe paulistana, sino que se convirtieron en hitos de planificación urbana. Estas infraestructuras, resultado de décadas de inversión pública y coordinación técnica, demostraron que incluso en un contexto de crecimiento caótico es posible implementar soluciones eficientes, inclusivas y sostenibles.

Pero la exposición no sólo celebrará los aciertos, también propondrá un análisis crítico del crecimiento desordenado de la ciudad, marcado por la especulación inmobiliaria y los problemas ambientales y sociales derivados de un desarrollo vertiginoso. “Así será posible aprender tanto de los errores como de los aciertos de São Paulo, una ciudad donde los extremos conviven”, indicó el curador.

“São Paulo – Ciudad Invitada” incluirá además un texto curatorial que recorrerá la historia paulistana desde su fundación hasta la contemporaneidad, con especial atención al proceso de metropolización del siglo XX. El objetivo, según el curador, es ofrecer un relato equilibrado de una ciudad “donde los extremos conviven” y cuyo camino puede servir tanto de advertencia como de inspiración para urbes que enfrentan desafíos similares.

La Bienal Internacional de Arquitectura de Santa Cruz ha consolidado, a lo largo de sus tres últimas ediciones, una valiosa tradición: invitar a ciudades cuyo desarrollo urbano y arquitectónico puede ofrecer aprendizajes significativos para otras urbes de Latinoamérica. En 2020, lo fue Córdoba, Argentina, reconocida por su equilibrio entre patrimonio histórico y modernización. En 2022, el turno llegó para Medellín, Colombia, cuyo modelo de urbanismo social es estudiado en todo el mundo. Y en 2024, Lima, Perú, aportó su mirada desde la complejidad metropolitana y la diversidad cultural. Esta línea curatorial ha permitido que la Bienal se convierta en un espacio de intercambio de experiencias, desafíos y soluciones comunes para las ciudades de la región.